Anaissa es una marca comprometida en ser respetuosa con el medio ambiente en su fabricación, así como con la salud de sus consumidores. Por este motivo, durante el proceso de fabricación de nuestras prendas no hay desechos residuales, con la finalidad de reducir el impacto medioambiental, y a su vez, no existen sustancias nocivas presentes en nuestros tejidos.
Desde 2014 Anaissa garantiza la calidad y ecología de sus productos bajo el certificado internacional OEKO-TEX® Standard 100. Para obtener esta certificación todos las etapas del proceso de fabricación y los productos realizados son sometidos a estrictos controles y análisis de laboratorio periódicamente. De hecho, cuanto más contacto tenga el producto con la piel, más estrictos serán los requisitos que debe cumplir. De esta manera se aseguran de que los productos textiles con el sello de calidad OEKO-TEX® presentan propiedades inocuas para la piel y no perjudican la salud de los consumidores.
¿Sabes cómo fabrican las marcas que consumes?
En la mayoria de los casos los consumidores desconocen cómo han sido fabricados los productos textiles que compran. Desde luego, no debido a una falta de interés por parte de los consumidores sino por una falta de información ya que no se les proporciona este tipo de conocimientos. De hecho, cada vez son más las personas preocupadas por el medio ambiente, que desean llevar a cabo un consumo responsable, y sobre todo, preocupados por cómo afectan los productos que compran a su salud y a la de su familia.
Por todo ello, es importante revisar el etiquetado de las prendas que compramos y comprobar qué información nos proporcionan. Por un lado, el país en el que esté fabricado la prenda nos da muchas pistas sobre el proceso de fabricación y las sustancias químicas utilizadas, ya que sabemos que existen países con una legislación muy laxa en lo que se refiere a componentes en la fabricación y seguridad de la salud humana. Por otro lado, si la prenda que vamos a adquirir posee en su etiqueta un certificado ecológico podemos estar tranquilos a la hora de comprar porque tenemos todas las garantías de salud necesarias porque nos certifica que carece de sustancias nocivas que puedan perjudicar nuestra piel.
Las prendas producidas bajo el certificado internacional OEKO-TEX® Standard 100 están etiquetadas con este logotipo. Es importante que aprendamos a reconocerlo.
¿Qué riesgos tiene para la salud llevar prendas con sustancias nocivas?
Entre las muchas sustancias nocivas que pueden estar presentes en los tejidos que adquirimos en establecimientos habituales se encuentran ftalatos, colorantes azoicos, alquifenoles, compuestos bromados, orgánico estánico, perfluorados, nonilfenoles etoxilados (NPE) o metales pesados. Para los que no tenemos unos conocimientos avanzados de química estos nombres no nos suenan y desconocemos sus efectos en un primer momento, pero se conoce que todas estas sustancias son venenos para el ser humano, e incluso, algunas de ellas son consideradas sustancias cancerígenas y disruptores hormonales. Desde Greenpeace han llevado a cabo la campaña Detox para informar a la población sobre las sustancias químicas en la industria textil. Si quieres saber más te recomendamos leer el informe que realizaron tras analizar prendas de marcas de todo el mundo.
Por suerte, no todo son malas noticias. Actualmente cada vez son más las marcas, que como Anaissa, están preocupadas por el impacto medio ambiental de nuestra industria y en ofrecer productos 100% seguros para la salud de las personas.
Podéis comprar tranquilos prendas fabricadas bajo el certificado OEKO-TEX® Standard 100 y con etiquetas de Textiles de Confianza. De esta manera os aseguráis de que:
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Se evitan alergias y dermatitis, especialmente a personas con pieles sensibles
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Aparte del tejido básico, mediante el sistema certificador se analizan también las costuras, entretelas, grabados y los accesorios no textiles como botones, cremalleras, remaches, etc.
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Protegéis vuestra piel, con especial cuidado con las prendas en contacto con las zonas íntimas y las zonas más delicadas de la piel.
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Las prendas certificadas han de presentar un valor pH apto para la piel.
